Vida de Iglesia

La caída del hombre, obviamente, se dio a causa de querer ser igual a Dios. Este fue el pensamiento original que sembró Satanás en la cabeza de Eva, tal como lo dice la Escritura en Génesis 3:5. Ahora bien, el hombre cayó porque él mismo se abrió un espacio que le dio lugar a su caída, en otras palabras, el hombre encontró la manera de justificar su caída. Para que me entienda la idea que quiero transmitirle con este pensamiento, es parecido a la actitud de algunas hermanas que quieren comprarse el par número cien de zapatos; ellas saben que ya tienen bastantes, sin embargo, buscan una razón en sí mismas para convencerse de que en realidad necesitan ese par número cien. Similar fue la actitud del hombre en el huerto, él estaba pleno, sin embargo, para poder caer tuvo que generar un espacio que justificara su pecado.  El hombre, estando en el huerto, se abrió un espacio que lo justificara caer, de lo contrario su propia conciencia no le hubiera permitido cometer pecado. Satanás trabajó

DOS PROBLEMAS QUE NOS IMPIDEN ARMONIZAR CON DIOS Para que nosotros podamos armonizar con Dios hermano tenemos que entender estos dos problemas básicos: 1. El primero es que nuestra naturaleza es egocéntrica, terrenal e individualista, y debido a ello es que nuestra vida en realidad no armoniza con Dios.  Nuestra naturaleza de forma natural no armoniza con Dios porque es egocéntrica, esto quiere decir que normalmente pensamos solo en nosotros, o preguntémonos: ¿qué hacemos nosotros en la Iglesia? hacemos lo que llena nuestros deseos, lo que llena nuestra visión, lo que nos conviene, etc. Es obvio que así jamás podremos armonizar con un Dios que no pensó en sí mismo, Él pensó en nosotros, y nos amó de tal manera que se entregó, se dio por nosotros para que tuviéramos Vida. Entonces la naturaleza de Dios lejos de ser egocéntrica es despojada de sí misma y siempre se expresa para los demás, por lo que es contraria a la nuestra.  Por otro lado también nosotros somos terrenales, un vivo ejem

¿CUAL ES EL PROPÓSITO DE ARMONIZAR CON EL CUERPO DE CRISTO? Colosenses 2: 2-3  v.2 para que sean alentados sus corazones, y unidos en amor, alcancen todas las riquezas que proceden de una plena seguridad de comprensión, resultando en un verdadero conocimiento del misterio de Dios, es decir, de Cristo, v.3 en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento. Si podemos hablar de un propósito por el cual debemos alcanzar armonizar con el Cuerpo es que nosotros podamos ser enriquecidos con todo aquello que el Señor nos ha dado en Cristo Jesús. En la Carta a los Efesios se hace mención que cuando nosotros estamos unidos en amor unos con otros podemos llegar a conocer el misterio de Dios, tanto su altura, su profundidad, su longitud, etc. Esto nos muestra que es en la comunión con el Cuerpo e indiscutiblemente cuando alcanzamos la unidad que empiezan a desatarse las maravillosas riquezas en Cristo Jesús, no hay cosa más grande que Dios nos haya dado, que conocerlo

INTEGRARSE A LA IGLESIA, EL MENSAJE QUE LAS GENERACIONES MAS VIEJAS DEBEN TRANSMITIRLE A LOS MÁS JÓVENES DEL PATRIMONIO ESPIRITUAL Dice 2 Timoteo 1:3 “Doy gracias a Dios, al cual sirvo desde mis mayores con limpia conciencia, de que sin cesar me acuerdo de ti en mis oraciones noche y día; 4deseando verte, al acordarme de tus lágrimas, para llenarme de gozo; 5trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también”. Uno de los incidentes que más viven las Iglesias es la poca tolerancia que los hermanos adultos tienen para con los jóvenes. Normalmente a los muchachos se les critica, se les acusa de carnales, y por ende, son tomados en cuenta, muy poco, o nada en lo referente a servirle al Señor. Este artículo va dirigido sobre todo a los hermanos adultos, por lo tanto, yo les pregunto a ustedes: ¿Se han dedicado ustedes como Loida y Eunice a transmitirle una fe no fingida a sus hijos, a sus ni

LOS MAYORES DEBEMOS TRANSMITIRLE A NUESTRAS GENERACIONES LO BUENO QUE HEMOS APRENDIDO EN LA VIDA Tito 2:1 “Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina. 2Que los ancianos sean sobrios, serios, prudentes, sanos en la fe, en el amor, en la paciencia. 3Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien; 4que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos, 5a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada”. En estos versos encontramos algunas recomendaciones que el apóstol Pablo le hace a los hermanos mayores. Las generaciones adultas, como los “Tradicionalistas” y los “Baby Boomers”, tal vez no sean tan aptos para la tecnología como la generación “Z”, pero eso no es razón para obviar lo mucho que los mayores aprendieron en la vida, y lo mucho que tienen para enseñarle a los más jóvenes. La vida no sólo se trata de