El Conocimiento de Dios y el Conocimiento Humano.
1 Corintios 8:1 “En cuanto a lo sacrificado a los ídolos, sabemos que todos tenemos conocimiento. El conocimiento envanece, pero el amor edifica. v:2 Si alguno cree que sabe algo, no ha aprendido todavía como debe saber; v:3 pero si alguno ama a Dios, ése es conocido por El”.
En este pasaje, el apóstol Pablo trata el aspecto de lo sacrificado a los ídolos, tema polémico para muchos de los hermanos de Corinto aunque para otros era algo normal, pues, era costumbre ver en los mercados a muchas personas vendiendo carne ofrecida a los ídolos. Sabiendo el apóstol Pablo que el asunto de lo sacrificado a los ídolos era un asunto pecaminoso, aunque muy relativo en ciertos aspectos, tuvo que introducirse al tema utilizando los versículos de 1 Corintios 8:1-3.
Para que entendamos el contexto de este pasaje, el conflicto para los corintios era ir a la carnicería y comprar carne que había sido sacrificada a los ídolos. El apóstol les aconseja que si no sabían la procedencia de la carne que comieran de ella, pero si sabían que la carne había sido sacrificada a los ídolos que no comieran. Entre líneas podemos ver que hay algo más que el simple acto de comer, o no; ésta es la razón por la cual, para el apóstol era sumamente complicado contestar esta pregunta de los corintios. Para mí se tornó en algo maravilloso poder entender los versos en los que Pablo se introdujo en medio de su respuesta a los corintios, siendo un punto mucho mas elevado para nuestra revelación y edificación.
Cuando Pablo explicó los versos del 1 al 3, hizo un paréntesis del tema que iba a hablar. Este pasaje empieza diciendo: “Sabemos que todos tenemos conocimiento…” es con esa frase que Pablo se introduce para hablar de una manera muy sintetizada acerca del conocimiento de Dios y el conocimiento humano; es realmente en este punto donde nos instruye para que hagamos una diferencia entre el conocimiento de Dios, y el conocimiento que se produce por nuestro propio raciocinio.
Lo primero que quisiera explicarles es que existen básicamente dos conocimientos, uno Divino y el otro humano; el primero tiene su fuente en Dios, el segundo se origina en la capacidad mental del hombre. Es necesario que nosotros entendamos esta diferencia, y que distingamos el uno del otro. El fin de alcanzar el conocimiento de Dios es poder ser edificados espiritualmente. Lo único que nos hace crecer y producir Vida es lo que Dios nos enseña, no lo que nosotros conocemos humanamente.
Hasta acá, teóricamente, no tenemos problema alguno para asimilarlo, el problema está en que no logramos distinguir el conocimiento de Dios y el conocimiento humano. Muchas veces pensamos que el conocimiento de Dios es saber Las Escrituras, tener dominio de las doctrinas, y de todo aquello que implique un conocimiento bíblico, pero eso no es lo que dice el apóstol Pablo. El apóstol no está hablando del conocimiento de lo bueno y lo malo, del conocimiento de la palabra y del conocimiento de cosas como esas, pues podemos conocer las palabras de nuestro Señor Jesucristo y Su Escritura y aún así estar basados en nuestro propio conocimiento. Es ahí donde se torna conflictivo este asunto y nos es necesario comprender las cosas según Dios.
Probablemente al leer las Escrituras, orar, cantar, meditar en el Señor, etc. estemos buscando conocer de Dios, pero al hacer estas cosas lo que menos hallamos es el verdadero conocimiento que viene de Él. Hermanos, el conocimiento de Dios no lo podemos buscar, ni escudriñar a nuestra manera, porque cada vez que metemos nuestra mente en el asunto, no aparece en escena el conocimiento de Dios. Todo lo que es inherente a Dios se origina en Él, y es de Él. En este punto estriba el conflicto por el cual muchos cristianos, a pesar de que ingresan a seminarios y tienen estudios profundos de la Biblia, están en muerte espiritual, precisamente, porque nunca han tocado el conocimiento de Dios.
Cuando alguien cree en el Señor puede optar por decidir entre dos caminos, el primer camino es quedarse ignorante en cuanto a la Palabra. Muchos creyentes, equivocadamente, se jactan de decir que no son grandes estudiosos de La Escritura, actitud que no es digna de aplaudir. Si bien es cierto, a Dios no le importa si somos grandes letrados, o no; quiero recordarles que dentro de los doce discípulos del Señor existía gente no letrada, pescadores, hombres incultos, del vulgo, pero con todo y eso, la gente se maravillaba al oírlos hablar, pues hablaban con la sabiduría que viene de lo alto. El segundo camino infructífero es proponerse conocer la palabra y todo aquello que impliquen ser asuntos de Dios, sin embargo, los que transitan este camino siempre llegan a un estado de muerte. Ninguno de estos dos aspectos funcionan para los hijos de Dios. Veamos lo que nos dice al respecto el apóstol Pablo.
EL CONOCIMIENTO QUE ENVANECE
El conocimiento que envanece es producto de lo natural en nosotros. Nosotros nos envanecemos de lo que somos y de lo que tenemos; los mortales jamás nos vamos a sentir orgullosos con lo de alguien más, al contrario, eso nos causa envidia. Este conocimiento “malo” lo vemos reflejado en 1 Corintios 8:1 cuando dice: “sabemos que todos tenemos conocimiento”. Esto quiere decir que todos tenemos capacidad de conocer y aprender las cosas de Dios pero debemos tener cuidado en discernir si estamos aprendiendo lo de Dios o si estamos siendo enseñados por Dios. Quiero que leamos un verso para que logremos entender un poco más este asunto, dice Juan 6:45 “Escrito está en los profetas: “Y todos serán enseñados por Dios.” Todo el que ha oído y aprendido del Padre, viene a mí”.
El conocimiento de Dios es aquel que aprendemos por Él mismo, es decir, el que Dios nos enseña. A diferencia del conocimiento humano que es aquel que de nuestra cuenta buscamos aprender las cosas de Dios, aunque parece lo mismo, son dos cosas muy distintas. Si nosotros podemos distinguir bien entre estos dos conocimientos, podremos concluir que el conocimiento de Dios no estriba en cuánto conocemos de Él, sino que es aquel conocimiento que su origen y naturaleza es Dios mismo.
Lo que debemos hacer para conocer según Dios, es exponernos a Dios para que Él nos enseñe. Todo lo que aprendemos de Dios sin ser enseñados por Él es igual a cualquier conocimiento natural, es decir, no puede producir Vida en nosotros. La Biblia dice: “Tú crees que Dios es uno. Haces bien; también los demonios creen, y tiemblan.” (Santiago 2:19) Los demonios creen, es decir, conocen quién es Dios pero no por eso obtienen la Vida divina en su ser.
Todo lo que es provocado por nosotros es de la carne, y lo que es de la carne, carne es. Todos los esfuerzos y los años que muchos han pasado tratando de conocer “lo” de Dios, son los causantes de su misma muerte espiritual. Lo único capaz de producir regeneración en el hombre es un toque de Dios. Lo único que transforma genuinamente al hombre es la voz de Dios y Su Palabra. ¿Cómo hago, entonces, para que sea Dios quien me enseñe? Contestemos esta interrogante en el siguiente punto:
EL CONOCIMIENTO QUE NOS HACE TENER INTIMIDAD CON DIOS
Dice 1 Corintios 8:3 “pero si alguno ama a Dios, ése es conocido por El”. Este verso nos enseña que el conocimiento de Dios no se produce en el intelecto de la mente, sino en una relación íntima con el Señor. Déjeme resumirle en unas breves palabras algo que he descubierto personalmente: “todo lo que hemos aprendido de la palabra debemos llevarlo a la presencia del Señor para que Él se digne a enseñárnoslo”.
En lo natural nos damos cuenta que nadie llega a tener un título universitario sólo por llegar a una Universidad a demostrar que sabe lo suficiente para ser ingeniero. Si alguien se ha desempeñado en su vida normal como un ingeniero mecánico, aunque tenga cincuenta años de ejercer “como” tal, ninguna universidad le otorgaría el derecho de tener un título sólo por lo mucho que conoce, primero tendría que inscribirse, cursar las materias, aprobarlas y luego graduarse para obtener su título. Hermanos, no es lo mucho que aprendamos de la Biblia lo que nos dará Vida, sino es lo que Dios mismo nos diga lo que provocará Vida en nosotros. Debemos llevar lo que conocemos del Señor a Su presencia y dejar que sea Él quien nos explique o simplemente nos diga Su misma Palabra a través de Su boca; otra vez les digo: “…serán todos enseñados por Dios. Todo el que ha oído y aprendido del Padre, viene a Él.”
¿Por qué no nos causa un efecto de Vida la Palabra de Dios? Por que la Vida no se trata de cuánto aprendemos, sino cuánto de eso es lo que el Señor nos enseña. Sólo lo que Dios nos enseña puede causar un efecto que transforme nuestro ser y nos regenere. Déjeme decirle, y aunque suene raro, aún la revelación misma por sí misma no nos cambia. Lo que debemos hacer con la palabra revelada es exponernos (con ella) delante de Dios, platicar con Él (de ella), permitiéndole que sea Él quien nos la explique, es ahí donde surge el verdadero conocimiento de Dios. No es con nuestras fuerzas e intelecto que obtendremos el conocimiento para Vida por medio de la palabra, sino es Dios quien debe hablarnos.
Para muchos sonará absurdo pensar que debemos orar o buscar al Señor hablándole de Su Palabra, pero ¿quién dice que hablar con Él de nuestras penas, conflictos, situaciones y circunstancias es mejor?, ¿Acaso no es mejor hablarle de Su misma Palabra, para que Él nos hable de Sus misterios? No nos hemos dado cuenta que el tema predilecto de Dios es hablar lo que Él mismo ya dijo. Cuando llegamos delante de Dios y platicamos con Él de lo que hemos aprendido o conocido de Su Palabra y logramos interesar Su corazón, entonces, Dios nos puede explicar para que de verdad conozcamos como debemos conocer.
Antes de terminar, quiero volver a leer la frase de 1 Corintios 8:2 “Si alguno cree que sabe algo, no ha aprendido todavía como debe saber” Esto quiere decir que si aprendo algo de la palabra del Señor, todavía no lo sé como debería saberlo, pues el conocimiento no se adquiere por lectura sino por iniciativa Divina. Ustedes se preguntarán ¿Ya no debemos leer? claro que sí, lea, luego vaya a Dios y dígale cuan maravillosos son sus pensamientos, seguro que Él va a querer explicarle mucho más.
¡Aleluya!
Apóstol Marvin Véliz
Dios, en su abundante amor nos a dado todo lo que necesitamos para conocer todo lo que debemos conocer.
ResponderEliminarLa biblia contiene la revelacion necesaria para el conocimiento que necesitamos si lo exponemos en la presencia del señor.
El conocimiento de dios expuesto ante su presencia el que nos a sido revelado por su palabra nos hace que la escritura se vuelva util para nosotros lo que dice 2timoteo 16:17"Toda escritura es inspirada por Dios, y util para enseñar,para redarguir,para corregir,para instruir en justicia,a fin de que el hombre de dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra". Ese es el efecto del conocimiento de dios lamentablemente vivimos bajo nuestra propio conocimiento al final esto nos trae muerte.
una cosa es muy cierta, dios nos ha puesto su conocimiento al alcance nuestro, por lo tanto el conocimiento de Dios esta ligado a su persona misma y para ello solo lo tocamos por espíritu. el es espíritu y solo los que lo hacen por espíritu lo pueden obtener.
EliminarAL LEER ESTE TEMA ME RECORDABA DE LA VIDA DE PABLO ANTES DE SU CONVERSION,Y NOS LO EXPLICA COMO ERA EL EN EL SIGUIENTE VERSO:
ResponderEliminarFlp 3:5 circuncidado el octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley, fariseo;
Flp 3:6 en cuanto al celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia de la ley, hallado irreprensible.
Flp 3:7 Pero todo lo que para mí era ganancia, lo he estimado como pérdida por amor de Cristo.
Flp 3:8 Y aún más, yo estimo como pérdida todas las cosas en vista del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor, por quien lo he perdido todo, y lo considero como basura a fin de ganar a Cristo,
PABLO ANTES DE SU CONVERSION ERA UN CONOCEDOR DE LO DE DIOS,UN HOMBRE MUY CELOSO DE LA LEY DE MOISES.
EL PODIA GLORIARSE DE SU CONOCIMIENTO Y RESPETABA TANTO LA LEY QUE ERA IRREPRENSIBLE ANTE LOS HOMBRES,PERO ANTE EL SENOR ESTABA REPROBADO.
PERO CUANDO VEMOS EN HECHOS 9 LA COVERSION QUE TUBO PABLO EL PUDO EXPERIMENTAR EL CONOCER AL SENOR PERO ESE CONOCIMIENTO VENIA DE LA MISMA PERSONA DEL SEÑOR ESTA REVELACION LO HIZO CAPAZ DE DEJAR TODO ESE CONOCIMIENTO HUMANO QUE ERAN PARA EL MOTIVO DE QUE GLORIARSE Y ESTO LO HIZO CON TAL DE CONOCERLO A EL.
PABLO COMPRENDIO QUE LO QUE ANTES CONOCIA DE DIOS NO ERA COMPARABLE CON LA EXPERIENCIA QUE ESTABA TENIENDO DE QUE CRISTO MISMO LE HABLARA.
LA VOZ QUE PABLO OYO DEL SEÑOR FUE CAPAZ DE TRANSFORMAR SU VIDA.
EN GALATAS PABLO PUDO DECIR :Gál 1:15 Pero cuando Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre y me llamó por su gracia, tuvo a bien
Gál 1:16 revelar a su Hijo en mí para que yo le anunciara entre los gentiles, no consulté enseguida con carne y sangre,
EL DESEO DE DIOS ES REVELAR A SU HIJO PARA QUE LO CONOZCAMOS Y QUE ESTO PRODUZCA VIDA EN NOSOTROS,EXPONGAMONOS AL SEÑOR Y DEJEMOS A UN LADO NUESTRO CONOCIMIENTO NATURAL Y DEJEMOS QUE EL NOS ENSEÑE.
y aun mas no solo para su conversión pablo lo dejo todo en lo que se refiere a la vida que tenia ahora como cristiano, con tal de alcanzar a conocer la plenitud del señor que implica un conocimiento del señor a nivel corporativo, el cristo-iglesia. aleluya.
Eliminarhay un texto en 1 Corintios 2.11, DICE.
ResponderEliminarporque ¿quien de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el Espiritu de hombre que está en él?.
Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el espiritu de Dios.
1 Corintios 8:2 “Si alguno cree que sabe algo, no ha aprendido todavía como debe saber”
el esiritu del hombre conoce las profundidades del hombre. La mente del hombre solo conoce lo superficial.
que lindo que cuando podemos unir nuestro espiritu con el de nuestro Dios , podemos entender a Dios.
Abram cuando Dios le hablo que herdaria la tierra de Cannan , todo aquello que pudo ver a simple vista , le creyo al señor. pero faltaba algo donde debia experimientar el conocimiento de Dios y era como El Señor obraria con la simiente que El le prometio.
en su mente el entendio la promesa, ahora comenzo a razonar humanamente y se dio cuenta que no podia ser, y por medio del consejo de su mujer , desidio adoptar un camino facil, engendar un fruto de su carne con Agar su esclava, pero esto no era de Dios.
la simiente de Dios, el fruto que el señor espero vino despues que el señor le hizo sacar lo que el penso que era bueno y agradable. el fruto que trajo Dios por medio de su espiritu hizo que una mujer esteril y un hombre anciano pudieran concebir y dar un fruto de vida por medio de Isaac que es tipo de Cristo.
esto me llama la atencion, pues lo que demos como fruto corporativo, como miembros y como Iglesia de Cristo en donde el señor nos permita estar establecidos , traera, si es que amamos a nuestro Dios en su espiritu y en nuestro interior la vida misma de Dios. siendo tipo o figura Sara y Abraham de la Iglesia y dando como fruto la vida misma del CRISTO GLORIOSO.
por eso si hay algo que me caló en este mensaje es este precioso pensamiento que nos compartir y vuelvo a repetir:
Dice 1 Corintios 8:3 “pero si alguno ama a Dios, ése es conocido por El”. Este verso nos enseña que el conocimiento de Dios no se produce en el intelecto de la mente, sino en una relación íntima con el Señor. Déjeme resumirle en unas breves palabras algo que he descubierto personalmente: “todo lo que hemos aprendido de la palabra debemos llevarlo a la presencia del Señor para que Él se digne a enseñárnoslo”.
eso de llevar todo a la presencia del señor es muy cierto, solo así las cosas tienen el sentido correcto en Dios. ademas el conocimiento de Dios es intrínseco, es profundo y no tiene manera de cuantificarse ni cualificarse por medio de la razón, de este solo tenemos atisbos al pensamiento cuando el señor nos lo aclara por medio de la palabra escrita. aleluya.
EliminarLo que nosotros alcancemos a conocer de Dios por nuestros medios y por nuestra capacidad y no lo llevemos a la presencia del Señor para que él nos lo enseñe, solamente nos traerá gloria humana porque es el fruto de nuestro esfuerzo pero cuando el Señor nos lo explica como fruto de esa relación de amor y dependencia con él, alcanzará no solo para nuestro provecho sino que también será vianda para edificar a nuestros hermanos.
ResponderEliminarQue seamos como los sacerdotes levitas hacian los panes con harina (figura de las escrituras) que cada 8 días cambiaban los 12 panes de la proposición que estaban en la mesa delante del Sr para luego convertirse en el sustento de ellos y sus hijos.
Lev 24:5 Y tomarás flor de harina, y cocerás de ella doce tortas; cada torta será de dos décimas de efa.
Lev 24:6 Y las pondrás en dos hileras, seis en cada hilera, sobre la mesa limpia delante de Jehová.
Lev 24:7 Pondrás también sobre cada hilera incienso puro, y será para el pan como perfume, ofrenda encendida a Jehová. Lev 24:8 Cada día de reposo lo pondrá continuamente en orden delante de Jehová, en nombre de los hijos de Israel, como pacto perpetuo. Lev 24:9 Y será de Aarón y de sus hijos, los cuales lo comerán en lugar santo; porque es cosa muy santa para él, de las ofrendas encendidas a Jehová, por derecho perpetuo.
Hno. César Ordóñez
el pan de la proposición o pan de la presencia o el rostro de Dios, era el pan que por su permanencia en el santuario tenia la virtud de lo de Dios. y recordemos de un pan que ni siquiera se comía, era el pan que estaba en una urna en el arca, el cual representa la esencia del conocimiento de Dios y el pan de la proposición el que se se da por medio de lo que es de Dios y lo alcanza a elaborar el hombre. aleluya.
Eliminarespero haberme dado a entender con esta figura.
Eliminar¿Por qué no nos causa un efecto de Vida la Palabra de Dios? Por que la Vida no se trata de cuánto aprendemos, sino cuánto de eso es lo que el Señor nos enseña. Sólo lo que Dios nos enseña puede causar un efecto que transforme nuestro ser y nos regenere. Déjeme decirle, y aunque suene raro, aún la revelación misma por sí misma no nos cambia. Lo que debemos hacer con la palabra revelada es exponernos (con ella) delante de Dios, platicar con Él (de ella), permitiéndole que sea Él quien nos la explique, es ahí donde surge el verdadero conocimiento de Dios. No es con nuestras fuerzas e intelecto que obtendremos el conocimiento para Vida por medio de la palabra, sino es Dios quien debe hablarnos.
ResponderEliminarEl anterior pensamiento es lo que mas me llamó la atención del artículo, porque muchas veces nos conformamos con conocer humanamente, pero esto no nos causa vida, y que hermoso comprender que debe ser Dios quien debe hablarnos la palabra que nosotros creemos saber, por eso dice la escritura
1Co 8:2 Si alguno cree que sabe algo, no ha aprendido todavía como lo debe saber;
Mat 11:25 En aquel tiempo, hablando Jesús, dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque ocultaste estas cosas a sabios e inteligentes, y las revelaste a los niños.
Dios danos la sencillez para que no nos conformemos con conocer la letra, sino que puedas procesarnos en tu conocimiento el que se origina en ti, porque nuestra mente es tan finita que no puede contener tu sabiduría, ni entender tus misterios, los cuales solo son mostrados a los que se hacen como niños. Lo necesitamos Señor!!!
Hna Wendy Cubías
el conocimiento de Dios llega a nosotros por el contacto con la vida divina, luego lo entendemos por medio de la iluminación divina y nada de esto se tiene sin estar en el y con el. amen.
EliminarEste ha sido un tema que en lo personal a quebrado mi vida pues siempre me e esforzado por conocer más y más e llenarme de todo tipo de conocímiento y eso no es lo malo lo malo es no exponerlo a Dios para que sea el en su metodología y didáctica maravillosa quien imprima el conocimiento en nuestros corazones para vida
ResponderEliminarGloria a Dios por este tema !!!
que gozo me da saber que a tu vida como a la vida de otros puede ser de bendición este medio y el tema compartido hoy.
Eliminaraprovecho para animar a todos a mantener la comunión por medio de estos escritos.
me preguntaba hace poco ¿como es que los creyentes podían mantener la comunión con los apóstoles con tanta distancia y con tan poca comunicación? por medio de las cartas y los escritos que ellos les enviaban en su momento.
para otros posiblemente no, pero para todos nosotros los que caminan en asociación con el misterio que el señor me ha dado, puedo decirles que este es un buen medio para estar en comunión. amen.
No existe mente humana capaz de comprender los misterios de Dios. El Omnisciente trasciende todo razonamiento. Isaias 40: 13 Quien guio al Espiritu del Senor, o como consejero suyo le enseno? v.14 A quien pidio consejo y quien le dio entendimiento? Quien le instruyo en la senda de la justicia, le enseno conocimiento, y le mostro el camino de la inteligencia? La ensenanza humana tiende a oscurecer el consejo divino . Como dijo el escritor "Porque vuestra lealtad es como nube matinal y como el rocio, que temprano desaparece". Me he hecho tantas interrogantes en cuanto al cristianismo !!Bendito sea Dios por esta luz que nos trae a traves del hno Marvin. y he podido entender lo que decia Oseas 4:6 Mi pueblo por falta de conocimiento perece.
ResponderEliminarLa inspiracion divina hace preguntas a las cuales la mas alta inteligencia y la mas profunda sabiduria humana no puede responder. Pero Dios nos las revelo a nosotros por el Espiritu; porque el espiritu todo lo escudrina, aun lo profundo de Dios. Si queremos ser ensenados por el Espiritu Santo vengamos ante Jesus con toda sencillez y humildad como Maria que se sentaba a sus pies para oir y aprender del divino maestro.
Bendiciones a todos.
Hna Esperanza
estoy de acuerdo con eso que el consejo del hombre oscurece el consejo de Dios, pues dice en otra parte, porque mis caminos no son vuestros caminos y mis pensamientos no son vuestros pensamientos. de manera que siempre lo de Dios vibra en una esfera en la que el hombre es incapaz de vibrar.
EliminarHermana Esperanza, que bendicion verla en este blog.
ResponderEliminarLa sabiduria de Dios y su vida estan en el cuerpo de cristo que hoy se manifiesta por los muchos en su Iglesia.
quiero aprovechar para bendecir su vida, e invitarla para que participe en un chat en whatssapp que tenemos todos los hermanos que estan en la diaspora, fuera de nuestras fronteras.
para que nos bendiga y ser de bendicion a su vida,
en la distancia pero siempre cerca por medio del espiritu que un dia nos bautizo a todos como herederos y coherederos juntamente con la persona de Jesus el Cristo, nuestro salvador, y nuestra vida.
En Juan 14 ; 24 muestra que observar la Palabra de Jesus es amarlo, como lo dice en 1a Corintios 8;3, el seso de amarlo hace que busquemos mas de su Vida,y entonces el Señor comienza a instruirnos, el mismo Señor Gesus predico solo lo que escuchaba de su Padre.Job 42:4 dice que después de reconocer su incapacidad espiritual,entonces el Señor lo instruye,pero debemos reconocer con humildad neutra inferioridad y desear amar al Señor sobre todas las cosas para que el nos enseñe.
ResponderEliminar