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COMO ACERCARNOS A DIOS POR MEDIO DE SU PALABRA.



COMO ACERCARNOS A DIOS POR MEDIO DE SU PALABRA.- 

Para poder acercarnos a Dios por medio de Su Palabra, es bueno considerar algunos consejos de los antiguos, es decir, de los hermanos que nos han antecedido y practicaron lo que muchos de ellos le llamaron: “La Lectio Divina” (y a lo que nosotros le hemos llamado Lectura Bíblica Anagógica). Dice un dicho popular: “La práctica hace al maestro”; esto es una gran verdad, debemos ser humildes, prestar atención, y aprender de los hermanos que caminaron esta ruta de la contemplación. 

A lo largo de la historia Dios siempre se ha provisto de creyentes que tengan la conciencia de que la religión absorbió la esencialidad del Evangelio. Muchos de estos hermanos, en su tiempo lograron ver esta realidad, y en la luz que Dios les fue dando, salieron de la religión, y avanzaron en la Verdad de Dios. Estos creyentes entendieron que el ser humano debe buscar a Dios por medio de la oración, y concluyeron que la manera más acertada de alcanzar la unión divina es por medio de la contemplación. 

La Contemplación no es algo nuevo, más bien fue la experiencia de los apóstoles del Señor y de los creyentes de la Iglesia del principio, lo que pasó es que al degradarse la Iglesia a la institucionalidad, también se perdió la esencia del Evangelio. A través de los años Dios empezó a tocar los corazones de algunos hombres que, aunque no tenían toda la luz, desearon encontrarse con Dios. En su deseo por buscar la ruta hacia la unión divina, muchos de ellos se hicieron monjes, eligieron vivir de manera austera, se enclaustraron, y se apartaron del mundo para dedicarse a buscar a Dios. Estos hermanos escribieron algunos de los consejos que vamos a dar a continuación, los cuales están totalmente respaldados en La Escritura. Es digno que nosotros aprovechemos la experiencia de estos hermanos que fueron pioneros en el recobro de esta verdad, pues, eso nos permitirá a nosotros tener un mayor avance en nuestra comunión con Dios. 

La Biblia es un instrumento que nos puede causar muerte espiritual, o bien nos puede servir como una puerta dimensional para accesar a la Presencia de Dios. Si no sabemos acercarnos a la Biblia, lejos de sernos de bendición, ella nos puede causar un impacto negativo; dice 2 Corintios 3:6 “… porque la letra mata, mas el espíritu vivifica”. Esto es como un cuchillo, en las manos equivocadas éste puede ser un instrumento para matar, pero en las manos de una cocinera servirá para preparar los alimentos. Es necesario, entonces, saber acercarnos a La Escritura para que nos sirva como un medio para accesar a la Presencia de Dios. 

Los antiguos llegaron a descubrir cuatro formas básicas de cómo acercarnos a la Biblia para entrar en comunión con Dios. Obviamente, los principios son los mismos aunque los nombres que les dieron a estos procesos varían un poco entre unos y otros. 

1.- ENTENDER DE MANERA BÁSICA Y SENCILLA EL PASAJE. 

Tenemos que reconocer que Dios decidió explicarnos Su verdad junto con una cultura, un tiempo, un territorio específico, y muchos detalles bien particulares del pueblo de Israel. Dios pudo haber escogido a los Vikingos como los receptores de los oráculos divinos, pero no lo hizo con ellos, sino con un pueblo llamado Israel. Dice Romanos 3:1 “¿Qué ventaja tiene, pues, el judío? ¿o de qué aprovecha la circuncisión? v:2 Mucho, en todas maneras. Primero, ciertamente, que les ha sido confiada la palabra de Dios”. El apóstol Pablo nos dice claramente que Dios le confió Su Palabra a Israel, de manera que tenemos que entenderla bajo un contexto judío, y no con una mentalidad occidental, o americanizada. Para entender la Biblia de manera básica debemos entender lo inherente al pueblo de Israel, eso no quiere decir que tengamos que ser teólogos, o eruditos en el idioma hebreo y griego, sino bastará con leerla sabiendo que fue escrita por judíos que vivían en el Medio Oriente, en una cultura muy diferente a la nuestra. Tampoco necesitamos estudiar y conocer de la cultura judía en otra literatura, basta con leer la Biblia con un sentido básico de comprensión y poco a poco la iremos entendiendo por sí misma. No inventemos, ni supongamos lo que no dice la Biblia, sólo leámosla y entendámosla por lo que ella dice. 

Gracias a Dios la mayoría de traducciones que existen de la Biblia son muy fieles a los manuscritos originales; prácticamente todas son dignas de elogio, por lo que no tendremos dificultades para entender su contenido. 

2.- ENTENDER LA VOLUNTAD DE DIOS A TRAVÉS DEL PASAJE. 

Al acercarnos a la Biblia también debemos captar cuál es la voluntad de Dios, cuáles son Sus deseos, Sus planes, Su manera de ser y de obrar. También debemos ser abiertos a entender lo específico que Dios quiera decirnos mientras leemos. No todo lo que está en la Biblia nos va a transmitir un mensaje de tipo personal, pero sí todo lo que leemos nos va a mostrar los principios de Dios, Su esencia, Su naturaleza, Su metodología, etc. Todas estas cosas debemos identificarlas al leer anagógicamente. 

3.- ORAR LO QUE HEMOS LEÍDO 

Luego de entender la lectura, y captar la intención divina, pasamos a la etapa de orar lo que hemos leído. Tengamos cuidado de no desviarnos mientras oramos, en este tiempo no debemos salirnos de la temática que acabamos de leer. Hay otros tiempos para orar sobre otras cosas, interceder, cantar, etc. pero en este tiempo lo que debemos orar es lo mismo que acabamos de leer. Debemos exponerle a Dios nuestro corazón, y decirle que nos unimos al sentir de Su voluntad manifestada en el pasaje. 

Al orar asentimos la voluntad de Dios, le demostramos a Él que nos importa lo que nos está diciendo. Si alguien en algún momento nos cuenta que tiene planes de ir a la universidad, y nosotros sólo le decimos: ¡Ah, qué bueno! nos damos la vuelta, y nos vamos, lo único que le dejamos claro a la persona es que no nos importa lo que él o ella vaya a hacer. Dios es una persona, Él está pendiente de lo que hacemos ante Su Palabra, es por eso que Él prometió venir a hacer morada únicamente con aquellos que aman y guardan Su Palabra. Dios se fija si nos interesa lo que nos dice La Escritura. 

Si nosotros leemos el pasaje de Juan 1:14 “Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros…” y lo pasamos como que estuviéramos leyendo un periódico, Dios se va a fijar en tal actitud, y tampoco nos va a hablar mayor cosa. Él espera que nosotros le digamos en oración: “Señor estoy agradecido por lo que Tú hiciste, me maravilla tu amor, me causa admiración ese gesto de despojarte de tu divinidad para hacerte hombre. ¡Oh! Señor por eso quiero decirte que acá está mi vida, quiero colaborar contigo, quiero anunciar tu Nombre, quiero decirle a las almas que Tú te hiciste carne, que habitaste entre nosotros”, etc. No debemos desviarnos a orar otra cosa, limitémonos a orar sobre el pasaje. 

4.- FINALMENTE ENTRAMOS EN CONTEMPLACIÓN. 

Luego de orar con pensamientos hilvanados en base a lo que hemos leído, entramos a un tiempo de contemplación. Lo que haremos en primer lugar es escoger una palabra sagrada (o una palabra específica) en base a la lectura que acabamos de hacer. 

Explicaré brevemente lo que significa la palabra sagrada o específica. Básicamente consiste en elegir una palabra con el fin de ubicar nuestra atención, y volvernos de la distracción a la contemplación. La palabra específica es parecida al famoso ruido “shhh” que nosotros hacemos con nuestros perros para que nos pongan atención. De igual manera funciona la palabra específica, sólo que de una manera suave; al inicio de la oración nos es útil porque nos ubica en cuanto a la intención de estar delante de Dios. Conforme avanza el tiempo nos sirve en los momentos en que los pensamientos nos han distraído de la centralidad de la oración, de modo que ella nos vuelve a ubicar delante de Dios. La palabra específica debe ser corta, no debe ser una oración, ni tampoco debemos pronunciarla, basta con ponerla frente a nuestro momento presente psicológico como una señal de que estamos delante de Dios. 

En este caso que estamos enfocando la Lectura Bíblica Anagógica, es bueno que utilicemos como palabra sagrada algo de lo que acabamos de leer o entender del pasaje, y de esa forma nos adentraremos a la contemplación. 

Los antiguos que se dedicaron a la Vida Contemplativa, en su mayoría de orden católica, llegaron a la conclusión que estos cuatro pasos son básicos para estar en comunión con Dios. Estos principios no son inventos, son más la necesidad que surge en la experiencia espiritual de una vida contemplativa. Al principio le dije que estas cosas las podemos encontrar con diferentes nombres en algunas obras literarias, pero responden a necesidades que surgen en la travesía hacia la vida contemplativa. Esto es como la necesidad física que tenemos de comer, lo hacemos porque nuestro cuerpo nos lo pide al menos tres veces al día. Nunca necesitamos de un libro para aprender que debemos comer todos los días, nos lo enseñó la vida; ya sea un latino, un anglosajón, o un chino, en el idioma que sea todos comemos porque sentimos esa necesidad. Igualmente es esto que estamos hablando de lo contemplativo, pueden haber diferencias nominales pero los principios y las necesidades espirituales que experimentamos son las mismas. 

Algunos antiguos le llamaron a los cuatro puntos anteriores de la siguiente manera: 

LA LECTIO: Que consiste en entender de manera básica y sencilla el pasaje. 

EL MEDITATIO: Entender la voluntad de Dios a través del pasaje. 

EL ORATIO: Orar lo que hemos leído 

LA CONTEMPLATIO: Entrar en contemplación. 

Si usted es diligente puede indagar en muchos libros acerca de esto, y encontrará información muy útil al respecto. De antemano le aconsejo que busque literatura, pero lea entresacando lo precioso de lo vil, reconociendo que lo único que es infalible es la Biblia. Los demás escritos tendrán sus virtudes y sus errores, pero no por ello vamos a despreciar lo que con gran esfuerzo escribieron los santos de Dios que nos antecedieron. 

Apóstol Marvin Véliz

Comentarios

  1. Si esta práctica era la normalidad de los apóstoles y la Iglesia de Cristo en el principio, deberá continuar siendo una virtuosa ruta para los discipulos de hoy.
    Si la centralidad del evangelio es una persona y está es Cristo, ese verbo hecho carne ahora lo veremos a la manera como lo expreso el evangelista Juan en el verso catorce del primer capítulo del evangelio de Juan , y vimos su gloria..que gloria? El entender que el mismo es la imagen del padre y contemplarle. En la costumbre religiosa se nos enseño a aprendernos la biblia y recitarla de memoria, pero esa ligereza con la que leemos la escritura que muchas veces nos hace tomarla como un periódico en donde solamente leemos lo que mas nos llama la atencion perdiendo muchas veces notas que podrían tener una real importancia. En mi niñez uno de mis tíos maternos acostumbraba leer el periódico de pasta a pasta tomando una cantidad de tiempo exagerada, pero una cosa si se, que eso no le cambio en nada, por otra parte vi desde mism primeros años a mi abuelo materno leer la biblia y ponernos a leerla a diario, pero una cosa me llamo la atencion al final de sus dias, su lectura muy probablemente era anagogica, ya no leía más allá de contemplar al señor y pasaba horas deleitándose en algo que había leído en poco tiempo. Si a esa lectura le conectamos la intension divina y entendemos lo que el señor nos invita a orar seguramente nuestras oraciones serán objetivas y conectadas a la voluntad de Dios. Que armonía, tan maravillosa , pues luego de haberlo realizado, podremos en silencio esperar sosegadamente en El. Creo firmemente que nuestro presente psicologico se verá influenciado de la vida divina hasta que nuestra permanecía sea voluntaria y nuestro ejercicio en el señor sean vidas entregadas a su plan y a su voluntad. Me llena de gozo saber que esto es de dominio universal y que todo aquel que busque halle. Dios bendiga estas enseñanzas.

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    1. creo que todo cristiano que a perseverado en la oración y la lectura de la biblia por años y que halla encontrado la vida en el señor seguramente practico una oración contemplativa aunque sea empíricamente y lo mismo en la lectura. pues lo único que se encuentra al final del camino sin la contemplación y la lectura bíblica anagogica es muerte.
      creo lo mismo que tu con respecto a tu abuelo y que hermoso fuera escuchar experiencias en esta tónica a estos hombres y mujeres de Dios que sin enseñanza encontraron el camino correcto.

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  2. Si cada uno tenemos el anhelo y la necesidad de buscar al Señor, de estar delante de su presencia, es necesario poner en practica esto tan hermoso que se nos a sido transmitido no solo para tener un conocimiento de la palabra, sino para tener un tiempo de comunión con Dios y de esa manera el pueda crecer en nosotros.SALOMON AGUILAR P

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    1. es nuestra responsabilidad, la practica de estos hermosos principios.

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  3. Es importante poner en práctica esto que se nos ha sido enseñado porque muchas veces fallamos en que leemos la palabra y no buscamos nutrirnos de ella sino solo queremos llenarnos de conocimiento y al final quedaremos con un gran vacío en nuestro interior pero ahora con esta revelacion podemos entender que lo mas importante de escudriñar las escrituras es buscar un acercamiento con la vida de el Señor. Benjamin Aberto

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    1. exacto, has dado en el centro de la enseñanza, no es asunto de conocer mas de la palabra, es conocer mas del señor por medio de la palabra. aleluya.

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