“ES NECESARIO QUE EL QUE SE ACERCA A DIOS CREA QUE LE HAY…” Quiero iniciar este artículo explicándoles algo concerniente a la fe. Por cuestiones didácticas, digamos que hay dos tipos de fe; a una que le llamaremos “la fe gestadora” y a la otra “la fe posesiva”. Quiero explicarle la diferencia entre ambas. La fe gestadora es, por ejemplo, la que se necesita para que el Señor geste un milagro de sanidad. Si alguien mira a un enfermo y Dios le habla que vaya a orar por él, esa fe será capaz de realizar el milagro de sanidad en la persona enferma. El hermano que oró no tiene capacidad en sí mismo para sanar a un enfermo, pero la fe le da la convicción para declarar y realizar el milagro. (Mateo 8:26; 9:2; 9:22; 15:28; 1 Corintios 12:4-9; ) Dice Hebreos 11:1 “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. Si leemos este pasaje correctamente, podemos darnos cuenta que este verso habla tanto de la fe gestadora, como de la fe posesiva. La fe