LA NECESIDAD DE LOS BERNABÉ PARA LA IGLESIA

LA NECESIDAD DE LOS BERNABÉ PARA LA IGLESIA

Para comenzar este artículo quiero que por un momento consideremos los diferentes seres vivos que existen en este planeta, los animales que hoy existen en todo el mundo, en realidad existen porque han podido adaptarse al cambio que va sufriendo el mundo en el que habitan. Especie que no se puede adaptar al ecosistema que lo rodea tiende a desaparecer. 

¿Por qué comencé con este pensamiento? Porque nosotros somos parte de esos seres vivos que habitan el planeta, y por lo tanto lejos de desaparecer, estamos en constante cambio, pues es innegable que las diferentes generaciones están siendo tan cambiantes a raíz de que el mundo está cambiando, esto debido al avance tecnológico que ha hecho que las cosas sean tan precipitadamente cambiantes. Es obvio que los seres humanos no se están extinguiendo, cada día hay más y más humanos en el mundo, pero estamos corriendo un gran peligro: en unos años, ustedes (los jóvenes) y ni siquiera ustedes, sino que sus hijos posiblemente sean psicológicamente “alienígenas” es su forma de pensar, serán tan diferentes, tan distintos y tan extinta la generación que les procreó.

Estoy impresionado de cómo la vida está cambiando de una manera tan impresionante que me alarma lo que le puede suceder a la Iglesia del Señor si nosotros no tenemos el cuidado y la perspicacia para poder hacer algo, no sólo por ustedes los jóvenes, sino también por nosotros los viejos, porque nos guste o no un día nosotros como viejos o ancianos nos pondremos en las manos de ustedes los jóvenes, así seamos las personas más astutas e inteligentes que hayan existido, algún día tendremos que cederle el derecho de paso a nuestros hijos, posiblemente a nuestros nietos, aún así hayamos construido un imperio económico tendremos que dejar que nuestros hijos y nuestros nietos se hagan cargo del futuro económico, y por supuesto el futuro espiritual de la Iglesia de Cristo.

Todo esto que les acabo de exponer nos debe llevar a inquirir un poquito sobre qué quiere Dios con nosotros, para entrelazar, para unir esfuerzos y fortalezas de las generaciones maduras con las generaciones presentes. Aun para el mundo esos serían los mayores logros educativamente, políticamente de todos los sectores de la esfera de la raza humana. Lograr enganchar el conocimiento, el interés y el aprendizaje de todo lo que las generaciones maduras han logrado edificar y poderlos pasar a las nuevas generaciones, de manera que los viejos puedan brindar los logros y que las nuevas generaciones puedan aprovechar los mismo, y agregar los nuevos conocimientos que ellos tienen, en otras palabras uniendo ventajas y eliminando desventajas. 

Ahora pasemos todo esto al campo espiritual, y hablemos lo que propiamente es La Iglesia. La Iglesia es un organismo viviente y tan viviente que tiene dos características de su vida: 

La Vida Divina: en nosotros fluye la vida increada de Dios por pura misericordia. Pero además de eso, que esta Vida Divina depositada en nosotros tiene el mismo circulo biológico de todos los seres vivos: nace, crece, se reproduce y muere. 

Entones hermanos, ¿Hacia dónde va La Iglesia? ¿Qué vamos hacer como Iglesia? mi anhelo a través de este artículo es exponerles cómo hacer para que nosotros como Iglesia que trasciende las generaciones, podamos brindarnos un apoyo, un frente común y no existir entre nosotros una brecha que cada día se va haciendo más grande entre generaciones, que de seguir así terminará un día como dos especies distintas metidas en un local o en una reunión de Iglesia. 

La pregunta es para ustedes jóvenes ¿Quieren ustedes ser la iglesia? O ¿Solo están por compromiso para ser iglesia?

Quiero escribirles acerca del accionar de un hombre de la Biblia, que pudo ser un instrumento del Señor, que supo auxiliar a los santos y brindó una ayuda oportuna para que las generaciones venideras no se desprendieran, y aprendieran todo lo que él había aprendido. Me refiero a BERNABÉ. Vemos específicamente tres características en este hombre:

No le importó poner en peligro su vida, y le presentó a Pablo a los apóstoles, es decir que lo expuso al Ministerio de la Palabra para que este siguiera creciendo espiritualmente cuando este tenía relativamente poco de caminar en el Señor.

Otra de las características de Bernabé, fue que tomó de la mano a las generaciones nuevas y las integró al trabajo; pues si recordamos él buscó a Pablo para que lo acompañara a la Iglesia de Antioquía para que se integrara al trabajo de la obra. Esto nos muestra que toda la generación madura está siendo llamada para que sean al estilo de Bernabé con el fin de brindarle a las generaciones nuevas la oportunidad de integrarse al trabajo de la Iglesia local.

Otro detalle fue el tiempo que dedicó específicamente para tomar una generación que por alguna razón había fallado, así fue que tomó a Juan Marcos hasta que lo integró y a pesar de todo supo superar las dificultades y fue útil al Señor.

¿Qué aporte hizo Bernabé a la Iglesia? El poder rescatar generaciones emergentes y ponerlas al servicio de Dios y la iglesia. 

Dios me permita ver una generación de la Iglesia renovada por unas mentes privilegiadas como la que Dios les ha permitido tener a ustedes jóvenes, pero llenas de Dios, renovadas porque ustedes tienen lo que nosotros no pudimos tener en aquel tiempo. Yo me quedaría conforme como apóstol al ver una nueva generación que ame y sirva en la Iglesia, que ame a Dios sobre todas las cosas y que sirva y trabaje en pos del reino de Dios. Que en ustedes el vivir sea Cristo para que el morir sea ganancia.

Apóstol Marvin Véliz